Afición de Chivas queda a deber en los duelos ante América en el Estadio Akron

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Afición de Chivas queda a deber en el Estadio Akron en los duelos ante América
Insultos y ataques hacia jugadores del América | Imago7

El fervor y la pasión en el fútbol son ingredientes fundamentales que dan vida a los Clásicos, esas contiendas que trascienden lo deportivo para convertirse en auténticos fenómenos culturales. Sin embargo, en ocasiones, esa pasión desbordada puede conducir a comportamientos lamentables que empañan la grandeza del deporte. Recientemente, en los enfrentamientos entre las Chivas y el América, se han evidenciado actitudes deplorables por parte de una fracción de la afición rojiblanca, dejando una mancha en la reputación del club y en el fútbol mexicano en general.

Durante los duelos celebrados en el Estadio Akron, se manifestaron situaciones que van en contra de los valores más básicos del deporte y la convivencia humana. En la ida de octavos de final de la Concacaf Nations League, se registraron gritos e insultos racistas dirigidos hacia Julián Quiñones, delantero del América. Gritos que también se reprodujeron en el duelo del pasado sábado. Estos actos, denunciados tanto por las Águilas como por las Chivas en comunicados oficiales, no solo son repudiables por su carácter discriminatorio, sino que también socavan los esfuerzos por promover la inclusión y la diversidad en el fútbol.

Lamentablemente, esta conducta negativa no fue un incidente aislado, sino que se repitió en el partido correspondiente al Clausura 2024 de la Liga MX. En esta ocasión, el blanco de los ataques fue Cristian ‘Chicote’ Calderón, exjugador de las Chivas que ahora defiende los colores del América. Calderón fue objeto de insultos homofóbicos y de agresiones por parte de algunos aficionados, quienes lanzaron objetos desde las gradas.

Estos episodios oscuros no solo manchan la imagen de las Chivas como club, sino que también reflejan una triste realidad dentro de la sociedad mexicana: la persistencia de actitudes discriminatorias. El fútbol, lejos de ser un mero entretenimiento, tiene el poder de influir en la sociedad y promover valores positivos como el respeto, la tolerancia y la igualdad. Por lo tanto, es responsabilidad de todos los actores involucrados, desde los clubes hasta los aficionados, trabajar en conjunto para erradicar este tipo de comportamientos inaceptables.

Es importante destacar que la gran mayoría de los seguidores de las Chivas son apasionados y respetuosos, y no deben ser juzgados por las acciones de unos pocos. Sin embargo, es fundamental que tanto el club como las autoridades deportivas tomen medidas concretas para identificar y sancionar a aquellos que incurren en conductas violentas o discriminatorias en los estadios.

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