Álex Aguinaga revela que rechazó al Milan para jugar en Necaxa: “No estoy arrepentido de llegar a México”

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Álex Aguinaga, uno de los mejores exjugadores de Ecuador de los últimos tiempos, reveló que rechazó la oportunidad de jugar con el Milan de la Serie A con tal de llegar al fútbol mexicano, liga en la que estuvo durante más de una década. 

El futbolista que formó parte del equipo ecuatoriano que clasificó al Mundial de 2002 señaló que no se arrepiente de haber formado parte de la historia del Necaxa, equipo que lo recibió con los brazos abiertos. 

“Vine a México con 21 años. Llegaba en primera instancia al América, después en el aeropuerto me dijeron ‘Bienvenido al Necaxa’. Termino en el Necaxa y casi 14 años después salí del equipo. Realmente fue una carrera larga con el equipo de los rayos, pero muy bonita”, indicó el exfutbolista en la charla con Alberto García Aspe. 

El sudamericano explicó que dirigentes del fútbol mexicano llegaron a tocarle la puerta cuando disputaba un partido de Libertadores, momento en el que le dijeron de qué se trataba el proyecto al que se sumaría. Las opciones rondaban entre el América y el Necaxa, pues en ese momento los representantes que se acercaron tenían el mando de ambas instituciones. 

“Me dijeron ‘estará en Necaxa abiertas las puertas’. En el transcursos de esos meses previo a la llegada de México, hay varias oportunidades de cambiar de aires, hacia Colombia como los Misionarios y la última parte al Milan de Italia, después de la Copa América del 89 que se jugó en Brasil”, agregó Álex Aguinaga.

El ecuatoriano tuvo la decisión más complicada de su vida: elegir a la Liga MX por encima de la Serie A, pues el Milan tenía intenciones de ir por su carta, pero Álex Aguinaga entiende que su palabra estaba por encima del sueño del fútbol europeo.

“Yo había dado mi palabra a nuestros amigos mexicanos. Me mantengo mi palabra, llego al aeropuerto y me dicen ‘Bienvenido al Necaxa’. No estoy arrepentido de llegar a México. Quizás la duda, si es que hubiera llegado al Milan, qué habría pasado. Imaginemos que hubiera tomado la decisión de irme al Milan, no me hubiera sentido cómodo, tranquilo. No sé si tomé la mejor decisión, pero tomé la decisión correcta”, finalizó.

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