La llegada de Raúl Alonso Jiménez al Fulham de la Premier League, abre la memoria para recordar al otro futbolista mexicano que pasó también por el cuadro de los Cottagers, y que desafortunadamente cuestiones totalmente ajenas a lo deportivo, truncaron su paso por la liga más cotizada a nivel mundial en la actualidad, como lo fue el caso de Carlos Salcido.
Raúl Jiménez llega a la escuadra blanca, con el fin de revalorar su carrera en la Premier League, donde ha tenido grandes momentos, pero desafortunadamente, después de una grave lesión en la que libró duras batallas, no ha podido ser el mismo de antes. El caso de Salcido fue completamente diferente, por la manera en que se dio su fichaje y al mismo tiempo, aterrizaje en la liga inglesa.
Llegó en gran momento a Inglaterra
El de Ocotlán llegó en 2010 al Fulham, precedido de una increíble y extraordinaria trayectoria por el PSV Eindhoven, donde el zurdo se convirtió en ídolo después de varias temporadas fuera de su país, y ya consolidado en la selección mexicana, donde era un inamovible pese a los cambios de proceso en los entrenadores.
De entrada, la gran apuesta del Fulham era importante, al apostar por un contrato por tres años, y donde el mexicano llegaba para convertirse en referente de la línea defensiva. Tiempista y fuerte en la marca, recio en cada cobertura, pintaba para tener un gran futuro en la Premier League.
Salcido tocó puntos muy altos con los Whites: titular indiscutible en su primera temporada con este conjunto, que en algunos momentos estuvo peleando por competencias europeas.
Su trabajo a nivel individual destacó, al grado tal de que fue considerado en dos ocasiones como parte del equipo ideal de la Premier League, por lo que su desempeño fue notado a nivel global en el ámbito y el entorno de la liga.
¿Qué evitó que siguiera en ascenso?
Desafortunadamente, su salida se dio por factores totalmente externos al plano deportivo. Su familia fue víctima de asaltos en su domicilio en dos ocasiones en Londres, e inclusive en la segunda oportunidad hubo mayor gravedad, al grado tal de que la propiedad en la que vivía Salcido y su familia, fue invadida por los ladrones, estando la esposa del jugador presente.
Después de haber vivido dos eventos de tal magnitud, al final de la temporada el futbolista decidió cerrar su etapa en el Fulham, y al mismo tiempo cerró su paso por el balompié de Europa, al emigrar de regreso a México y fichar con los Tigres de Ricardo Ferretti.