Brasil salva los papeles en el último suspiro

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En un partido vibrante, Brasil derrotó a Colombia por 2-1, en el Mané Garrincha de la ciudad de Brasilia, cuando caía el telón del encuentro. Los goles del local fueron obra de Raphinha (penal) y Vinicuis. Por la Tricolor había empatado Luis Díaz. Gracias a estos tres puntos, los de Dorival Junior aterrizan a la segunda posición. Los de Lorenzo cayeron al sexto. Otro duelo para La Canarinha que sigue sin caer en casa contra el elenco cafetero.

El duelo arrancó con muchas emociones. Brasil salió con todo, pisó el acelerador a fondo y buscó rápidamente abrir el marcador. Tuvo su resultado cuando Daniel Muñoz derribó en el área a Vinicius; el central dio penal y Raphinha lo transformó en gol. Su cobro fue a la derecha de Camilo Vargas y el portero se tiró a la izquierda. Esto le pasa seguido a Colombia cada vez que visita a cinco veces campeona del mundo.

Cuando se pensó que Brasil iba a salir por el segundo, bajó un cambio y le dio el balón a Colombia. Eso le dio confianza a la visita y fue ganando terreno. De a poco se fue acercando, sin peligro, en el arco que defendía Alisson. Al minuto 41, antes de ir al descanso, Jhon Arias roba un balón en la pésima salida del local, le da el balón a James Rodríguez; el zurdo asiste a Luis Díaz y el del Liverpool define de gran manera. Nada pudo hacer el portero, compañero de él en el Liverpool. Lo tiene de hijo: es la tercera vez que le marca por Eliminatoria.

Para el segundo tiempo, la consigna fue la misma. Brasil salió con todo para sacarle provecho a un gran defecto que ha tenido Colombia a lo largo de su historia. Salir sin estar activo, frío. Un remate de Vinicius lo atajó Camilo Vargas. El portero de Atlas ahogó el grito de gol. Eso despertó al elenco cafetero que volvió a tomar el balón y se paró nuevamente en el Mané Garrincha. Sin meter peligro, alejó al local de su arco.

Fueron pasando los minutos y cuando mejor estaba Colombia; tras un tiro libre de costado, Dávinson Sánchez y Alisson se chocaron muy fuerte. Ambos sufrieron golpes muy fuertes en la cabeza. Los dos tuvieron que dejar el campo. Eso, le dio otro aire a Brasil. Lo despertó. Sin ser el de siempre, ese de los 90. Tomó el balón y aprovechó que la Tricolor se quedó sin aire. Néstor Lorenzo se demoró mucho en los cambios y su equipo se cansó.

Como le viene pasando en los últimos partidos: final de la Copa América y ante Uruguay en Montevideo; Lorenzo volvió a leer mal el partido. Jorge Carrascal y Kevin Castaño entraron fríos, perdidos y eso lo supo aprovechar Brasil. Con el último aire se fue con todo y cuando caía el telón… Vinicius disparó al arco, el balón se desvió en la cabeza de Jefferson Lerma y Camilo Vargas -la figura de la Tricolor- no pudo pararlo.

Gracias a esta victoria, Brasil saltó al segundo lugar. Sin brillar. La derrota pone a Colombia en la sexta posición y sumó su tercera caída en la Eliminatoria. Lo que hace vital el duelo del próximo martes contra Paraguay en Barranquilla: prohibido no ganar. Vinicuis y su pandilla irán a Buenos Aires para verse con Argentina, los campeones del mundo.

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