Shikami no tengen, el programa japonés maldito
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Existen creepypastas que son ya tan famosas y reconocidas que nos han hecho perderles el miedo. Sin embargo, por cada historia que conocemos de memoria hay diez que se ocultan en los rincones más recónditos de Internet. Dada la naturaleza misma de las creepypastas, tendemos a dudar de los eventos que relatan, pero cuando se trata de algunas de estas historias, no podemos sino pensar y darle vueltas a la idea de qué pasaría si fueran ciertas. ¿Qué me protege a mí de, un día, encontrarme viviendo una creepypasta por haber descargado el archivo incorrecto de un sitio dudoso? ¿Quieres conocer una creepypasta oscura?
Shikami no tengen
Esta historia, como casi todas, apareció por primera vez en un sitio de tablón de imágenes. El relato cuenta sobre un niño que se mudó de ciudad. Como un acto de buena voluntad para un amigo suyo, antes de irse, le dejó copiar su colección completa de juegos de computadora, directamente de los discos de instalación. Al enfrentarse a las medidas antipiratería, el amigo en cuestión no pudo correr los juegos, por lo que decidió buscar en Internet alguna herramienta para crackearlos. El joven dio con un programa japonés de nombre Shikami no tengen que, a grandes rasgos, se traduce como cuatro dioses en el cielo. Este programa le permitió creackear los juegos y correrlos si mayor complicación.
El problema vino cuando, al intentar correr Portal, se encontró con que los enemigos tenían una apariencia perturbadora, casi como demoniaca. El amigo sabía que ésa no era la apariencia regular de Portal, por lo que creyó que podía tratarse de una de esas ingeniosas medidas antipiratería, como las que te presentamos en el pasado, así que decidió cerrar el programa. Al intentar hacerlo, la computadora empezó a producir voces en japonés, quienes sonaban asustadas; poco a poco, las voces pasaron del susto al terror y del terror a desgarradores gritos que el joven no podía comprender.
Para acompañar, su monitor mostraba imágenes de accidentes y muertes sangrientas y violentas, así como aparentes mensajes subliminales que le lavaron al cerebro al muchacho. Producto del incidente, el joven cometió varios delitos, incluyendo lesiones, tortura y asesinatos, los cuales documentó y envío al amigo dueño de los juegos. Cuando el joven que se había mudado quiso indagar sobre Shikami no tengen, no encontró nada en Internet sobre el programa, pero de lo que sí se dio cuenta fue de que la traducción no era cuatro dioses en el cielo, sino dios de la muerte en el cielo. Y es que, en japonés, la palabra para cuatro, shi, se pronuncia de la misma forma que la palabra para muerte. De hecho, en ese país, le tienen miedo al número cuatro, como nosotros en occidente al número 13, al punto de que no hay pisos cuatro en la mayoría de los edificios altos y no suele haber números de habitación cuatro, al considerarse maldito.
¿Tú qué harías si, de pronto, te encuentras con uno de estos programas malditos? ¿Crees que se trate de meras bromas de parte de hackers para atrapar incautos o de verdad habrá maldad detrás de estas historias?