Reseña de Call of Duty: Black Ops 6, la Guerra Fría terminó, pero no la pelea
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Call of Duty: Black Ops 6 era un juego esperado por múltiples razones. Más allá de ser una serie querida por los fans, es el primer juego de la franquicia en llegar como estreno de día 1 a Game Pass. Con esto, Microsoft busca hacer valer la inversión multimillonaria en la compra de Activision-Blizzard y, para su fortuna, la apuesta pagó con creces. Black Ops 6 logra el balance perfecto de todos los elementos que esperamos de un Call of Duty: intriga, traiciones, conflictos a gran escala, set pieces altamente cinematográficos, gunplay de primer nivel y una amplia variedad de armas, dispositivos y opciones tácticas. Pero si a eso le sumamos elementos RPG y el toque de espionaje propio de los Black Ops, tenemos una de las mejores entradas en la franquicia en años recientes. ¿Call of Duty: Black Ops 6 vale la pena? Sí, pero vamos a ver por qué. Reseña sin spoilers.
¿Es necesario jugar los otros Black Ops para entender Black Ops 6?
La campaña de Black Ops 6 es una secuela directa a Call of Duty Black Ops: Cold War, y también se relaciona con las misiones situadas en los 80 de Black Ops 2, así como con el Black Ops original. Así es que es recomendable haber jugado o conocer de la historia de Cold War. Esto, sin embargo, no impide que la historia pueda entenderse para quienes se acercan por primera vez a la serie, y resulta ser una celebración para los fans veteranos de la franquicia.
La historia nos pone en 1991. La Unión Soviética cayó, el Muro de Berlín fue derribado y las Fuerzas de Coalición lanzaron la Operación Tormenta del Desierto, para combatir el régimen tiránico de Saddam Hussein. En este contexto, vivimos los remanentes de la Guerra Fría, los espías están pasando de moda y todo parece estar en una calma relativa entre las potencias nucleares. Ahora, al conflicto se traslada a Medio Oriente, que ha tenido consecuencias hasta nuestros días.
A través de 11 niveles, nuestro equipo de operaciones secretas, compuesto por los operativos de la CIA, Troy Marshall y William “Case” Calderon, su manejadora, Jane Harrow, Frank Woods y, eventualmente el agente rebelde Russel Adler, quien fue incriminado en Panamá. A ellos se suman Felix Neumann, un genio tecnológico, y la asesina Sevati “Sev” Dumas, deberán encontrar y desmantelar el grupo paramilitar Pantheon, antes de que su plan se lleve a cabo. Para ello, montan base en una casa de seguridad abandonada en Bulgaria que solía pertenecer a la KGB, llamada The Rook y, desde ahí, despliegan sus operaciones.
La campaña de Black Ops 6 te ofrece varias formas para lograr tu objetivo
Algo que debe destacarse y que se agradece en una campaña de este estilo, es que las misiones están diseñadas para ofrecer varias soluciones a un mismo problema. Desde la forma de abordar la infiltración, que puede ser silenciosa o disparando a todo lo que se mueva, hasta árboles de diálogos con los NPCs. Incluso, hay misiones, como Hunting Season, que te ofrecen un mapa completamente abierto, un vehículo para moverte rápidamente, y libertad absoluta para completar los objetivos principales en el orden que quieras y hasta objetivos secundarios/áreas de interés marcadas con signos de interrogación a lo largo del mapa. Esto incentiva la exploración, pero también permite que los jugadores adopten el estilo de juego que más prefieran, y eso siempre se agradece.
Entre cada misión, podremos invertir el dinero reunido y, ehm, “encontrado” durante nuestros despliegues. Esto nos permite mejorar la base con estaciones nuevas, que nos abrirán la posibilidad de mejorar nuestras armas, equipo táctico y hasta nuestros stats y habilidades. Si sumamos ambas mecánicas, tenemos entre manos elementos RPG que ayudan a la inmersión y a tener un sentido de progresión mayor en el juego. Además, tener que buscar dinero, probablemente oculto o tras cajas fuertes -aunque puede estar simplemente regado por ahí- en cada misión incentiva la exploración, lo que hace que ambas mecánicas se complementen de forma perfecta.
En cuanto a la historia, el juego toca los puntos adecuados de tensión y los giros llegan en el momento justo, para lograr sorprender. Es un technothriller político y militar al final del día, por lo que no esperamos que se reinvente la rueda, pero los personajes y la trama general del juego enganchan al jugador, para querer seguir descubriendo qué pasa después. En ese sentido, Black Ops 6 recuerda a películas de acción de finales de los 80 y principios de los 90, a esos thrillers militares que recordamos con cariño.
Gráficamente, el juego luce increíble o, más bien, luce como debe hacerlo un juego AAA de precio completo en la generación actual, y más uno con tanto pedigrí como un Call of Duty. Visualmente no hay queja alguna y, al menos el lo que pudimos jugarlo, no encontramos glitches o bugs mayores, todo corrió en orden, de forma fluida sin perder cuadros, fluidez o fidelidad. En ese apartado, así como en el diseño sonoro, Call of Duty siempre ha tenido maestría indiscutible. Y aunque las expresiones de algunos NPCs son a veces algo antinaturales, no afecta la inmersión, simplemente nos recuerda que, por más fidelidad gráfica que haya, siempre hay espacio para mejorar rostros y expresiones que luzcan más humanas.
Multijugador de Call of Duty: Black Ops 6, más fluido que nunca
El multijugador de Call of Duty: Black Ops 6 fue controversial y divisivo desde el inicio. El anuncio de la inclusión del omnimovimiento llegó a causar conmoción entre la comunidad, quienes anticipaban un cambio radical en la velocidad y la forma en la que se juegan este tipo de shooters. Si bien no termina siendo algo tan frenético como Apex Legends, el Omnimovimiento sí permite un nivel táctico adicional y movimientos más rápidos en las partidas.
El juego incluye 16 mapas diferentes, todos completamente nuevos, lo que ofrece gran variedad a los jugadores y permite que las partidas se sientan frescas. Los diferentes modos de juego que, esperamos, se irán ampliando junto con la cantidad de mapas, permite que los jugadores tengan experiencias distintas y no monótonas, con clásicos como combate a muerte o eliminar al VIP en equipos de 4v4, pero también hay opción para utilizar mapas específicamente diseñados para partidas Strike, en modalidad 2V2, lo que da una dimensión diferente al juego, aún más tenso y estratégico.
Black Ops requiere estar siempre en línea, incluso para un solo jugador
Quizás uno de los aspectos más controversiales del juego sea la necesidad de estar siempre en línea, incluso si se quiere jugar en modo campaña. Esto hace que la función de cambiar de aplicación y regresar al juego implique tener que conectarse al servidor, lo que lo vuelve tedioso. Incluso el modo Zombies se ve afectado. Los fans estaban felices con la incorporación de modo de un jugador en Zombies, pero, lamentablemente, también requiere estar siempre en línea. Esto implica que, aunque se haga uso de la función de salvar y salir, los jugadores deberán volver a conectarse al servidor para continuar, lo que se vuelve cansado rápidamente. Adicionalmente, se puso un límite de 15 minutos de pausa en el modo de un jugador de Zombies, lo que puede parecer suficiente, pero termina siendo una limitante en un modo que no debería tenerla de cualquier modo.
Call of Duty: Black Ops 6 es una excelente entrada en la franquicia, y una buena forma de continuar con la serie. Ya sea que prefieran sólo la campaña o el multijugador y todos sus modos de juego, hay definitivamente algo para todos los aficionados a los FPS. Una excelente adición al catálogo de Game Pass que no hace sino demostrar el poder armamentista de Microsoft y sus estudios de casa. Con este lanzamiento, las dudas quedan despejadas, porque, sí, esa compra de Activision valió completamente la pena.