Reseña de Mario & Luigi: Brothership, el regreso de una saga

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La saga de Mario & Luigi sobresale en el mundo del gaming: juegos de combate por turnos con un sazón diferente, un humor particular y con un nivel de calidad bastante alto (aunque también cuenta con uno que otro tropezón).

Es por esto que el anuncio de una nueva entrega de esta franquicia dejó maravillados a propios y a extraños. Tanto a los veteranos de la saga que sienten curiosidad de saber como se desarrolla una nueva entrega conociendo el contexto del equipo de desarrollo original, como para los nuevos fans que han escuchado sin parar de esta saga y quieren vivirla por primera vez en su Nintendo Switch.

¿Pero Mario & Luigi: Brothership cumple con las expectativas? ¿Es el esperado regreso que muchos esperaban o es una propuesta que dejó a deber? Ya terminamos Mario & Luigi: Brothership y acá te dejamos nuestra reseña sin spoilers.

¿De qué trata Mario & Luigi: Brothership?

Mario y Luigi viven tranquilamente en el Reino Champiñon, cuando su mundo se mezcla con una dimensión misteriosa que los hace llegar a un barco bastante particular. Ahí encuentran a Conetta, quien les explica que están en Concordia: un reino de paz y tranquilidad hasta que el Conectárbol, un árbol que mantenía el territorio unido, fue gravemente dañado, lo que causó que todo el continente se fragmentara en diferentes islas y todos los habitantes terminaran separados.

Ahora los hermanos fontaneros tienen la misión de averiguar qué fue lo que sucedió mientras conectan de nuevo todas las islas para darle fuerza a un nuevo Conectárbol, navegando en 5 mares diferentes y enfrentándose a nuevos y viejos enemigos.

¿Qué estilo de juego tiene Mario & Luigi: Brothership?

El juego es por turnos, donde alternaremos entre Mario y Luigi para hacer diferentes ataques: el clásico brinco en los enemigos, el martillazo certero y una serie de ataques especiales llamados “ataques tandem”, con los cuales podremos hacer una cantidad mayor de daño a enemigos en especifico o a una tropa entera. La característica particular de estos ataques es que cada hermano tiene asignado un botón: Mario es A y Luigi es B.

Pulsando el botón de cada uno en el momento justo nos permite ir elaborando combos para hacer más daño a los rivales y continuar los ataques especiales; e inclusive a la hora de defendernos de ataques enemigos lo haremos con el botón correspondiente, lo cual te mantiene todo el tiempo atento para que no termines mezclando los botones y hagas defenderse al hermano que no era.

Las “clavijas” le añaden variedad al combate

También se añade al gameplay el concepto de “Clavijas”, las cuales son Perks que podemos equipar e inclusive hacer diferentes combinaciones: desde crear una onda expansiva para dañar a los enemigos cercanos, tirarles bolas de picos después de un ataque o inclusive utilizar ítems para restaurar nuestra salud automáticamente.

Estas clavijas se pueden ir creando a lo largo de la aventura si encontramos las dulchispas, pequeñas luces brillantes que están distribuidas a lo largo de todos los niveles, las cuales fomentan la exploración y la rejugabilidad de los niveles que ya terminamos.

El diseño de nivel cumple y sorprende, los objetivos y cómo llegar a ellos no resultan muy complicados o confusos, pero lo que es una realidad es que tal vez los niveles están saturados de combates. Se entiende que es para usar las clavijas lo más que se pueda y te vayas divirtiendo con las combinaciones y mecánicas de los botones al momento del ataque y la defensa, pero después de un rato se vuelve algo repetitivo y tal vez un poco asfixiante. El objetivo esta justo enfrente de ti pero antes tienes que participar en 4 combates diferentes que aportan muy poco a la experiencia del gameplay. Pareciera que el exceso de enemigos en los niveles es para “estirar” la duración del juego: hacer que rinda más de una manera artificial.

A pesar de esto, el apartado gráfico compensa la experiencia de una manera bastante grata. Las animaciones de los personajes, de los ataques e inclusive de las cinemáticas es excelso. Y la música no se queda atrás: el soundtrack pareciera sencillo pero pega fuerte. El tema principal cumple y se te va a quedar pegado durante mucho tiempo, así como los temas de batalla y los de cada nivel. Los gráficos y la música enriquecen completamente esta experiencia, siendo un punto muy fuerte a favor.

¿Vale la pena Mario & Luigi: Brothership?

En conclusión, Mario & Luigi: Brothership trae de vuelta una serie bastante querida por muchos de una manera muy amigable y abierta a nuevos jugadores. Aunque a los veteranos de la franquicia no les tome mucho tiempo el ver que no es el mejor de la saga, no significa que sea un mal juego. Al contrario, su propuesta es bien hecha, con un apartado gráfico diferente y bastante pulido, con un soundtrack interesante y pegajoso, y con horas de diversión para llevar en tu Nintendo Switch.

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