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Tiger Woods está más optimista de poder jugar golf el año próximo que de la Gira de la PGA logre completar un acuerdo con Arabia Saudí o inversionistas privados antes que cierre 2023.
Woods compareció ante la prensa el martes por primera vez en casi ocho meses, y mucho ha transcurrido desde entonces — una cirugía en el tobillo derecho que le mantuvo fuera, el sorprendente acuerdo de la PGA con los responsables de financiar la LIV Golf y su decisión de sumarse a la directiva de la PGA por primera vez en su carrera.
El astro se alista para disputar el Hero World Challenge, su torneo de fin de año en la Bahamas que reúne a 20 jugadores de primera línea. Woods dijo que su tobillo — pero no el resto de su físico — ha sanado — y dio a entender que confía disputar al menos un torneo al mes el año próximo, con el Genesis Invitational en el campo de Riviera como el primero.
Woods fue sincero al expresar su frustración de que él y otros jugadores fueron sorprendidos por las negociaciones secretas del comisionado de la PGA, Jay Monahan, y dos altos directivos, en las negociaciones que desembocaron en el acuerdo con el Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudí que se anunció el 6 de junio.
“Quedamos muy frustrado con lo ocurrido y tomamos medidas para que en el futuro se tenga que involucrar a los jugadores … no volveremos a quedar al margen del proceso como ha ocurrido”, dijo. “Parte de ese proceso fue entrar a la directiva y aceptar esa posición”.
También expresó fe en Monahan como un motivo para unirse a la junta directiva, “con lo que puede hacer a futuro y que no se repita”.
No entró en detalles, nada fuera de lo común debido a que las discusiones de directiva so de carácter privado.
El acuerdo para formalizar un proyecto comercial con fines de lucro fue con el fondo saudí y la gira europea. Pero otros cinco fondos privados ahora quieren participar.
Tras ser anunciado en junio, se fijó el 31 de diciembre como plazo para completarlo, aunque hay una cláusula para extenderlo.
“Tengo la confianza de que se podrá completar de alguna manera”, dijo Woods. “Ya sea el 31 de diciembre o después, todas las partes entienden que trabajamos en conjunto”.
Entre los temas por zanjar es el criterio para reinsertar en la gira a los jugadores de LIV que quieran volver y cómo encajarán las competencias de equipos.
Woods se expresó más optimista sobre su carga de torneos para 2024 al indicar que lo ideal sería un torneo por mes.
El plan sería competir en Riviera en febrero, The Players Championship en marzo y los majors en abril, mayo, junio y julio.
“Esta semana representa un paso enorme en esa dirección”, dijo.