Uno de los combates que causó más morbo previo a Wrestlemania 39 quedó resuelto. Logan Paul y Seth Rollins se vieron las caras sobre el cuadrilátero del SoFi Stadium causando el revuelo de los aficionados, y quienes sin duda no quedaron insatisfechos tras el resultado decretado.
Ambos estetas dieron de qué hablar en sus ingresos al recinto. El influencer, fiel a su estilo, llevandose la rechifla del respetable, ingresando por medio de una tirolesa, acompañado además de una botarga en forma de botella, que minutos después, se revelaría, sería la celebridad de internet, KSI. Por su parte, el exintegrante de ‘The Shield’ ingresaría al recinto, acompañado por una orquesta musical, con todo y maestro de ceremonias.
Ya una vez entre cuerdas, Rollins y Paul trataron de causar el mayor daño posible. Todo parecía indicar que era Logan quien se hacía de la ventaja tras dominar las acciones de peligro y tener maltrecho a Seth, sin embargo el luchador logró respirar en varias ocasiones; una de ellas, haciendo que Paul cayera en el error, ejecutando una plancha sobre KSI, sobre la mesa de transmisiones.
De nueva cuenta, Logan consiguió hacerse del dominio de la reyerta, y se esperaba finalizara con su rival, con un lance, de esquina a esquina, sin embargo Rollins reaccionó a tiempo y logró conectar patadas al rostro, suficientes para noquear al influencer, conseguir el toque de espaldas y llevarse la victoria en California.