Luego de que el Gran Premio de Australia fuera más que caótico con hasta tres banderas rojas, la tercera en la penúltima vuelta, tras el accidente de los monoplazas de Alpine, cuando Pierre Gasly tocó a su compañero Esteban Ocon; el piloto mexicano Sergio ‘Checo’ Pérez advirtió a la FIA (Federación Internacional del Automóvil) que era necesario detener la carrera ante el caos del último reinicio.
“Sí, era necesario porque hubo muchos incidentes. Al final hubo muchos incidentes y era necesaria la bandera roja. El último reinicio fue peligroso, en primer lugar por el calentamiento y en segundo porque no podíamos ver nada”, expresó.
“No podemos competir en esas condiciones. Un día habrá un gran accidente si no podemos ver nada”.
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Por otra parte, Checo Pérez se dijo contento por la carrera realizada, tercera del campeonato de la Fórmual 1, aunque lamentó que lo accidentada de la misma no le permitiera terminar en el podio.
“En general, fue un buen resultado hoy. Ayer, obviamente perdí un poco de confianza con el auto, pero hicimos muchos cambios durante la noche, lo que ayudó a entrar en la carrera. Tuve un muy buen reinicio la primera vez, salté tres o cuatro lugares pero luego fue un poco complicado con el tren DRS. Me frustré más tarde en la carrera porque no podía avanzar más, pero era muy difícil atravesar la parrilla con los neumáticos bajos y todos pasando rápidamente a los neumáticos duros”.
Durante la carrera, Sergio Pérez fue recuperando posiciones hasta colocarse en el séptimo lugar, para después ascender al quinto ante el incidente de los Alpine en el último reinicio
“Tal vez si hubiera sido un poco más agresivo antes, podría haber terminado más alto, pero estoy feliz de que hayamos terminado P5 e incluso hayamos logrado asegurar la vuelta más rápida. En general, esta carrera nos da confianza para ir a Bakú en unas pocas semanas y esperamos con ansias el desafío que trae… El objetivo era un control de daños y es lo que hemos conseguido hoy”.
Finalmente, el piloto mexicano lamentó que la fortuna no estuviera de su lado, ya que la estrategia que tenían se vio rebasada debido a lo accidentada carrera.
“Pero sí, era una apuesta y el coche de seguridad nos perjudicó, porque todo el mundo fue a los pits, así que no hubo mucha estrategia que pudiéramos hacer y eso nos desincronizó un poco y sí, significó una carrera un poco más difícil a partir de ese momento”.