Checo Pérez deslumbra en Las Vegas con un espectacular doble rebase que silencia críticas

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Checo Pérez y su espectacular doble rebase en Las Vegas | @F1
Checo Pérez y su espectacular doble rebase en Las Vegas | @F1

El Gran Premio de Las Vegas vivió uno de sus momentos más electrizantes gracias a Sergio ‘Checo’ Pérez, quien se lució con una actuación magistral que no solo reafirmó su capacidad como piloto, sino que también devolvió la confianza de su afición tras semanas de altibajos.

El mexicano, al volante de su Red Bull, ofreció una cátedra de manejo estratégico, destacando especialmente por su impecable administración de neumáticos en una pista exigente, donde el graining y las paradas en pits jugaron un papel crucial. Sin embargo, fue su destreza en los rebases lo que lo llevó a robarse el espectáculo.

La rivalidad con el neozelandés Liam Lawson, que venía creciendo dentro y fuera de las pistas, alcanzó un nuevo nivel en Las Vegas. En la vuelta 25, Checo aprovechó un momento de tensión entre Lawson y Kevin Magnussen para ejecutar un rebase quirúrgico. Sin titubear, se lanzó por el interior de la pista, alargando la frenada y dejando a Lawson sin opciones.

El punto culminante llegó en la vuelta 38, cuando Pérez logró lo impensable: un doble rebase que quedará grabado en la memoria de los aficionados. Mientras Lawson y Magnussen se enfrascaban en una batalla feroz por la posición, el tapatío evaluó la situación y, con una maniobra arriesgada pero precisa, adelantó a ambos por el exterior. Lawson intentó responder, llegando peligrosamente cerca de tocar el monoplaza de Checo, pero el mexicano mantuvo el control con sangre fría, dejando al público al borde de sus asientos.

El momento no solo fue un golpe de autoridad en la pista, sino también un mensaje claro: Checo Pérez sigue siendo uno de los pilotos más talentosos y combativos de la parrilla.

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