El gran fin de semana de Sergio Pérez en Bakú pudo haber terminado de otra forma, así lo reveló el piloto mexicano tras ganar el Gran Premio de Azerbaiyán.
“Realmente fue duro (el contacto). Tuve suerte especialmente de que el neumático delantero no explotó“, finalizó
¿Por qué Checo tenía miedo de perder el GP de Azerbaiyán?
Checo Pérez vivió un intenso duelo con su coequipero en Red Bull, Max Verstappen, por 40 vueltas, donde se desafiaron al máximo en un mano a mano que por poco le cuesta el triunfo al mexicano.
Esto debido a que en la vuelta 34, el mexicano estuvo a punto de chocar contra las protecciones del circuito con el neumático derecho, algo que logró minimizar y afortunadamente para él, las gomas no sufrieron demasiado daño, ya que pudieron haber reventado, terminando así con su gran carrera.
Tras ello, Checo montó una diferencia de más de dos segundo sobre su coequipero, quien también estuvo a punto de irse contra la barda en un par de ocasiones a lo largo de la carrera.