La carrera del Gran Premio de Bahréin fue la primera en esta nueva temporada de la Fórmula 1 y, a pesar de que todavía falta mucho, se pueden extraer algunas conclusiones. La primera de ellas es que Red Bull sigue muy por encima del resto de sus competidores y son la escudería a vencer un curso más. Otro aprendizaje del primer GP del año es que Mercedes está lejos de competir.
La escudería alemana decidió apostar por un diseño innovador “sin pontones” en su W14 para esta temporada, lo que dio como resultado que el monoplaza de Mercedes sea más liviano y delgado que el resto de la parrilla. Los cambios no fueron fructíferos para el equipo de Toto Wolff y el coste económico de los mismos representa un problema para las flechas de plata.
Helmut Marko, asesor deportivo de la escudería Red Bull, habló para el medio austríaco OE24 sobre los escollos que tiene que atravesar Mercedes de cara a este curso 2023.
“Mercedes tiene varios obstáculos (para progresar), eso está claro. No han hecho ningún progreso en comparación con la temporada pasada. Si nos fijamos en el retraso, incluso hubo un paso atrás”, declaró Marko.
El austríaco cuestionó las medidas tomadas por Mercedes y señaló que no es sostenible mejorar el coche constantemente con los límites que tienen en el presupuesto.
“Parece que han perdido el rumbo en alguna parte. Me pregunto qué harán ahora. El límite de costes les hace muy difícil mejorar el coche de forma rutinaria ¿Cómo montan un coche completamente nuevo? A menos que realmente lo hagan, lo que no asumiría después de la experiencia que he tenido ahora”, señaló el asesor de Red Bull.
Ahora mismo, Mercedes se encuentra en una encrucijada que puede marcar el destino de la temporada: tratar de salvar el nuevo modelo o tirar todo por la borda y regresar a las bases.