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Luego de haberse quedado con el tercer mejor tiempo en la Q3 del Gran Premio de México, el tricampeón del mundo Max Verstappen reconoció que no fue una tanda senncilla para él y es que la altitud de la Ciudad de México provoca que haya poco agarre en el circuito.
“Hay poca carga aerodinámica, hay poco agarre. Aquí es muy difícil hacer la vuelta perfecta, sobre todo por la altitud. Cuando intentas apretar más el coche ya no responde muy bien, se te va”, excusó el neerlandés, quien deberá salir detrás de los dos Ferrari.
Sobre las dificultades que tuvo, Max comentó: “Logré comprender el tercer sector aunque, en general, tuve más dificultades de las que pensaba. Sin embargo estamos todos muy igualados y la carrera de mañana será larga”.
“Me hubiera gustado salir desde la pole, pero veremos cómo va la carrera, saliendo de la primera curva”, sentenció el piloto que es el máximo ganador de esta carrera desde que México regresó al calendario en el 2015.