El regreso de Daniel Ricciardo a la Fórmula 1 para tomar el lugar de Nyck De Vries en AlphaTauri llamó mucho la atención por lo inesperado del movimiento. No era un secreto que el desempeño del joven piloto neerlandés no había dejado satisfechos a los directivos de Red Bull, sin embargo, pocos se esperaban que el australiano fuera quien ocupara dicho asiento.
A pocos días de que Ricciardo vuelva de manera oficial a la F1, el director de Red Bull, Christian Horner, reveló cómo fue que se fraguó el regreso a Red Bull del experimentado piloto de 34 años.
“Todo empezó en una habitación de hotel en México el año pasado. Tuve una reunión con Daniel y estaba claro que sus opciones para este año iban a ser un poco limitadas, y parecía bastante desolado. Le dije: ‘¿Por qué no vuelves a Red Bull durante 12 meses, fuera del coche, predominantemente? Nos ayudarías con el trabajo de simulación y un poco de pruebas de neumáticos, volverías al redil y redescubrirías tu pasión por el deporte’, porque estaba claro que no estaba disfrutando y, para ser honesto, no reconocía al Daniel de los últimos dos años, al que nos hemos acostumbrado y que ha crecido con nosotros”, señaló Horner en declaraciones recogidas por Motorsport.
“Así que empezó desde ahí y vino a conducir el simulador después de Abu Dhabi, un par de días después de Abu Dhabi, y fue un desastre. Había agarrado todos los malos hábitos posibles e imaginables. Antes trabajaba con un ingeniero y poco a poco fuimos solucionando el problema y en cada sesión iba mejorando, se veía que su lectura iba creciendo hasta el punto de estar absolutamente a la altura de los pilotos de carreras. El plan siempre fue incluirlo en la prueba de Silverstone. Le mantuvimos muy ocupado con actividades fuera de la pista, en términos de marketing, y la prueba fue impresionante”, agregó Horner.
El directivo de la escudería de Milton Keynes admitió que lo que motivó a dar ese paso con Ricciardo fue precisamente la prueba de Silverstone que sorprendió a todos pues asegura que volvieron a ver en él las cualidades que vieron hace 10 años cuando llegó por primera vez al equipo.
“Lo que más me sorprendió, cuando fui a echar un vistazo a la prueba, fue que teniendo en cuenta el hecho de que nunca había conducido este coche, que no había estado en un coche durante siete meses, en su tercera o cuarta vuelta bajó a un tiempo que estaba a menos de un segundo de lo que nuestros pilotos estaban consiguiendo.
“Luego, en su primera vuelta con neumáticos comparables, se podía ver que su confianza crecía más y más y esa primera vuelta, probablemente la séptima del día, le llevaría a la parte delantera de la parrilla. Fue realmente impresionante”, puntualizó.