Rubens Barrichello vivió con Michael Schumacher lo que Checo Pérez experimenta con Max Verstappen

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Por seis años, Rubens Barrichello fue el coequipero de Michael Schumacher en Ferrari, con quien nunca tuvo una buena relación, siendo relegado a la posición de segundo piloto para ayudar al alemán en todo lo que la escudería le pidiera o necesitara. Una situación similar a la que Sergio Pérez experimenta en la actualidad en Red Bull, con Max Verstappen como la cabeza del equipo de pilotos.

El piloto brasileño vivió bajó la sombra del 7 veces campeón del mundo, de quien asegura nunca recibió ninguna clase de apoyo en la Fórmula 1.

“Siempre he hecho amigos y siempre he tenido una buena relación con todos mis compañeros, pero Michael nunca me ha apoyado, nunca ha estado ahí para ofrecer ayuda, y yo nunca se la he pedido. Con Michael era diferente, muchas veces terminábamos un encuentro y luego empezaba otro con él; al final entendí que el equipo era sólo suyo”, mencionó Rubens Barrichello, en el podcast Beyond the Grid.

Rubens agregó que en su contrato “no decía nada sobre no poder luchar contra Michael. Por mi bien, he aceptado tantas cosas. Hubo muchas cosas a las que me negué, pero a algunas dije que sí porque desde hace seis años veo llegar mi momento.

“Cada vez que me preguntan, siempre digo que Michael era más fuerte que yo, sin dudas, pero ya estaba en Ferrari desde 1996, tenía cuatro años más de experiencia en la escudería y Jean Todt lo consideraba como un hijo”, finalizó el brasileño, quien recordó con una dosis de amargura el tiempo que pasó en Maranello.

Uno de los capítulos más recordados entre Barrichello y Schumacher se dio en el GP de Austria 2002, cuando el brasileño recibió la orden de dejar pasar a Schumi, cuando él lideraba la carrera. Inicialmente se negó a obedecer a Jean Todt, pero al final obedeció para darle el triunfo a su compañero.