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Brandon Aubrey mantiene su paso perfecto por la NFL después de colocar este fin de semana dos impresionantes goles de campo de 60 y 59 yardas, suficientes para contribuir en la victoria de los Dallas Cowboys por 33-19 sobre los Philadelphia Eagles dentro del AT&T Stadium.
Lo más sobresaliente es que el pateador extendió el récord de 30 goles de campo consecutivos desde el inicio en su carrera como jugador profesional de los emparrillados, nada mal para la estrella que comenzó en la NCAA y en la MLS como futbolista de fútbol soccer.
El ex jugador de la MLS decidió cambiar de disciplina y de no ser lo suficientemente reconocido en el balompié, ahora es toda una estrella en la NFL debido al cariño que le tienen los aficionados de los Cowboys por sus 30 goles de campo seguidos, ocho de ellos de al menos 50 yardas, la mayor cantidad para un novato en toda la historia de la institución de Dallas.
No contento con sus dos goles de campo de 60 y 59 yardas, agregó un par más de 45 y 50 yardas, cada uno justo en el último cuarto. Esto es un cambio radical para el equipo de la estrella solitaria debido a que hace una temporada no había buenas sensaciones con respecto al papel que desempeñaba Brett Maher, el hombre que falló cuatro puntos extras consecutivos en los playoffs contra Tampa Bay.
Dallas necesitaba forzosamente a un tipo de confianza y encontraron en Brandon Aubrey la solución perfecta. El pateador de 28 años convenció al equipo en la pretemporada pasada, un sueño hecho realidad después de su mal paso por su intento de convertirse en futbolista profesional de la MLS.
De la MLS a la NFL
Brandon Aubrey inició su carrera al quedar dentro de las filas del Toronto FC en la primera ronda del SuperDraft de la MLS en 2017, pero el combinado canadiense prefirió mandarlo a las ligas menores de la USL para desarrollar su experiencia en el terreno de juego. Una vez dentro del club filial del Philadelphia Union, prefirió retirarse por falta de oportunidades.
Decepcionado del deporte, el exfutbolista veía un partido de la NFL y su esposa lo animó a unirse al fútbol americano tras ver a un pateador fallar un gol de campo. Tras un largo intento, el Birmingham Stallions le dio cabida en la plantilla titular de la USFL, una liga pequeña de los Estados Unidos. Justo en este momento renunció a su trabajo como ingeniero en software por la mitad de su salario, pero la apuesta rindió frutos porque los Cowboys le echaron el ojo unos meses más tarde.