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La lesión de Aaron Rodgers al comienzo de la temporada actual de la NFL conmocionó a los aficionados de los emparrillados, sin embargo los New York Jets fueron los más dolidos porque en ese momento sabían que habían perdido una auténtica fortuna, pues al final de la campaña tendrán que poner sobre la mesa poco más de 37 millones de dólares para pagar el contrato de su estrella, algo que pudieron haber evitado.
De acuerdo con el portal Sportico, el combinado de la Gran Manzana recibió propuestas de algunas aseguradoras de pagar un seguro en caso de una lesión de su mariscal de campo titular, una decisión que rechazó el equipo debido a que no pensaron que una tragedia podría suceder dentro del terreno de juego.
Aaron Rodgers se rompió el tendón de Aquiles en el primer intercambio de castigo entre los New York Jets y los Buffalo Bills, momento en el que su equipo habría perdido unos 20 millones de dólares tras no contratar la póliza de seguro ante cualquier lesión de su figura y que garantizaba una devolución del 60 por ciento del sueldo anual del veterano.
Los pronósticos apuntan a que el mariscal de campo no estará disponible por el resto de la temporada, una baja sensible para las aspiraciones de los New York Jets de tener la pieza que les faltaba con el sueño de obtener un Super Bowl.
Todos los equipos de la NFL tiene la opción de proteger a sus principales jugadores con una póliza de seguro, sin embargo no todas las instituciones deciden contratar dichos seguros debido a lo oneroso que podría ser para las finanzas de las instituciones, ya que no siempre suelen cobrarse. De acuerdo con Sportico, la franquicia de Nueva York lleva una década sin pagar este tipo de seguros.