Agente que trabajó con Tom Brady habla de cómo el NIL y las transferencias afectan a la NCAA… y a la NFL
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El vocabulario del fútbol americano utiliza dos nuevos conceptos que impactan directamente a nivel universitario y profesional. La posibilidad de monetizar el “Nombre, imagen y semejanza” (NIL) de los jugadores, así como el portal de transferencias, han trastocado ambos mundos en lo deportivo y económico.
Reclutar talento para el fútbol americano colegial es tan añejo como el deporte mismo, pero ahora es diferente por la capacidad de ganar dinero a nivel ‘amateur’ vía patrocinadores. Las universidades todavía no pueden pagarle a los jugadores, pero si pueden ser vehículos para encontrar marcas comerciales a sus jugadores lo que cambió la forma de convencer a los jóvenes de preparatoria para comprometerse con los programas universitarios.
La evolución, crecimiento y adaptación del fútbol americano en todos sentidos ha contado como artífice y testigo a la familia Chow por los últimos sesenta años. Carter Chow, CEO de la agencia de representación Red Envelope Sports platicó en exclusiva con Claro Sports de su carrera, que comenzó cuando firmó a un exjugador de la universidad de Vanderbilt, Theo Horrocks.
Era 2004 cuando el mayor de los hijos del coach Norm Chow inició en el mundo de la representación, quien desde 1964 ha estado ligado al fútbol americano, desde la etapa como jugador, pasando a entrenador, donde ganó dos titules nacionales con USC además de ser artífice de la formación de quarterbacks como Jim McMahon, Steve Young y Philip Rivers, además de los ganadores del Trofeo Heisman Ty Detmer, Carson Palmer y Matt Leinart.
Carter Chow, al igual que todo el mundo del fútbol americano vive momentos de incertidumbre y adaptación con el NIL.
“Desde la perspectiva de mi negocio es que desde hace tres o cuatro años ha cambiado completamente debido al NIL y el portal de transferencias. Nosotros trabajamos con varios entrenadores y para ellos esta siendo cada vez más difícil hacer su trabajo, sobre todo en el aspecto de mantener unido al equipo. Es un mundo diferente ahora mismo con esta situación. Ejemplo las pequeñas escuelas que tratan de competir ahora tienen menos oportunidades y eso me da miedo pensarlo, ya que en un mediano plazo de cinco o diez años, esas pequeñas escuelas no tengan posibilidades de competir”.
Jugadores como Caleb Williams recibieron contratos millonarios para cambiar, en su caso, de Oklahoma a USC, lo cual
“El NIL no es para todos, realmente, no es para todos; hablemos de Caleb Williams dime otro nombre que haya ganado esa cantidad de dinero a nivel colegial, no lo encontramos- Tienes toda la razón y esa es otra manera de verlo, es un gran punto que tocas; regreso a los entrenadores que representamos, ellos están hablando de como se debe manejar esta situación desde el vestidor. “
“Quiero aclarar algo: yo siempre he pensado que los jugadores deben ganar dinero a nivel colegial ya que, las universidades están ganando mucho dinero, igual que la NCAA… todo mundo menos los jugadores, pero la parte más complicada, desde mi perspectiva, cuando tienes un jugador como Caleb, con esa cantidad de dinero que se dice, tres o cinco millones de dólares, eso impacta a sus compañeros en la dinámica del vestidor al ver que está masajeando un coche de miles de dólares y ellos deben seguir comiendo solo spaguetti porque no tienen más dinero. Esa disparidad esta impactando de inmediato la experiencia de estar en la escuela y sin duda es complicado para los entrenadores para seguir haciendo equipos”.
Adaptación a un nuevo modelo es la asignatura que vive el Fútbol Americano y la experiencia de todos debe sumar a lograr el balance perfecto. Carter Chow cuenta con la amistad y experiencia del más grande de todos los tiempos, Tom Brady.
“Fue algo muy, muy especial para mí. Tom era cliente desde mi firma ‘Yee & Dubin Sports’, sin duda ha sido y es un gran honor trabajar con él, estar a su lado todos estos años. Tom es una gran persona, un hombre de familia, le tengo un enorme respeto por todo lo que ha logrado dentro y fuera del terreno de juego”.