Quinn Ewers se declara elegible para el NFL Draft 2025 e inicia la Era Arch Manning en los Texas Longhorns

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Se acabó la carrera colegial de Quinn Ewers. El quarterback anunció el miércoles que no volverá los Texas Longhorns, ya que se declaró elegible para el NFL Draft 2025. No es visto como uno de los mejores prospectos, aunque hay mucha menos competencia entre los mariscales de campo que en 2024, además de que tenía detrás la sombra de Arch Manning, sobrino de Eli y Peyton, quien llevaba dos años como suplente en Austin.

Termina así una carrera colegial llena de contrastes, de un jugador que en su momento fue considerado el ‘sexto prospecto perfecto’ saliendo de la preparatoria, al ser calificado por 24/7 Sports con una calificación de 1.000, el primer quarterback en serlo desde otro Longhorn, Vince Young, en la Generación 2002, y que además fue la imagen de la nueva era de pago a jugadores.

Ewers adelantó un año su graduación de preparatoria para firmar en 2021 con Ohio State, ya que las leyes del estado de Texas impedían a los menores de edad recibir ingresos bajo las nuevas reglas de la NCAA del nombre, imagen y apariencia. Así que se fue a los Buckeyes, donde era el cuarto mariscal tras C.J. Stroud, Kyle McCord y Jack Miller. Jugó solo un partido, nunca lanzó un pase, pero tenía un contrato de 1.4 millones.

Tras un otoño en Ohio State y ya con 18 años, Ewers ‘volvió a casa’ y se transfirió a los Texas Longhorns, siendo titular las últimas tres temporadas. Completó 64.9% de sus pases para 9,128 yardas, 68 touchdowns y 24 intercepciones. Tuvo marca de 27 ganados y 7 derrotas, guiando a los Longhorns a su primer título de conferencia en más de una década, al ganar el Big 12 en 2023, además de que alcanzaron la final del SEC en 2024. Ambas temporadas concluyeron con apariciones en el College Football Playoff, pero en las dos cayeron en semifinales.

Si bien Ewers puso a los Longhorns de vuelta en los primeros planos del fútbol americano colegial, sus números no son impresionantes, todas las temporadas sufrió alguna lesión que le hizo perder algún partido, y fue responsable, en buena medida, de que Texas cayera en las semifinales ante Washington en 2024 y Ohio State en 2025. Si vieron el colapso de Sam Darnold las últimas semanas con los Minnesota Vikings, sucumbiendo ante la presión, Ewers tiene un problema similar de no poder crear cuando se aprietan las cosas dentro de la bolsa de protección.

Ewers no llega a la NFL como el prospecto ‘perfecto’ que era saliendo del High School. De hecho, es probable que no sea elegido en la primera ronda, aunque con múltiples equipos con necesidad de tomar un quarterback (además de las primeras dos selecciones, Titans y Browns, están Jets, Giants y Raiders en el Top 10), quizá algún equipo ‘se enamore’ de él, como pasó con Bo Nix y los Broncos, quienes le tomaron para además aprovechar el año extra de contrato que pueden tener los jugadores que salen en el Día 1 del Draft.

Lo que es una realidad es que, de momento, los dos mejores mariscales de campo del Draft son Cam Ward de Miami y Shedeur Sanders de Colorado. Ewers es valorado por Pro Football Focus como el séptimo mejor QB del Draft, por detrás de los dos finalistas (Riley Leonard de Notre Dame y Will Howard de Ohio State), además de Jalen Milroe de Alabama y Dillon Gabriel de Oregon.

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