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Jalen Hurts encendió las alarmas durante la localía de los Philadelphia Eagles tras recibir a los San Francisco 49ers debido a que el mariscal de campo tuvo que ser evaluado por una posible conmoción cerebral justo en las inmediaciones del Lincoln Financial Field, recinto que enmudeció al ver a su figura tendida en el campo para ser atendido por los médicos del equipo.
Cuando todo mundo pensaba que la figura de los Eagles iba a quedarse fuera del partido, al final del día sorprendió a propios y extraños porque regresó como si nada al terreno de juego después de una extensa evaluación en los vestidores del recinto que coreó su nombre al verlo de vuelta en el césped.
Los minutos se prolongaron al ver que Jalen Hurts no salía de las carpa médica y Marcus Mariota, mariscal de campo suplente de Philadelphia, acudió al terreno de juego para convertirse en líder temporal de la velada, hasta completar el tercer cuarto del partido con su público a su favor.
Después de varios minutos con algunas series de evaluaciones rápidas, Jalen Hurts regresó al campo para presumir que no tenía ninguna lesión pese a quedar maltrecho por la defensiva encabezada por Oren Burks y Warner, quienes pusieron en pésimas condiciones el hombro del mariscal de campo de los Eagles.
Algunas repeticiones revelaron que para fortuna de Jalen Hurts, su cabeza no golpeó el pasto a pesar de tener la peor parte del choque contra los jugadores de los San Francisco 49ers. De todos modos por preocupación y al ver un poco desorientado a su figura, los Eagles prefirieron sacar a su estrella para evaluarlo a profundidad, mientras Marcus Mariota trataba de perfilar sus jugadas ofensivas en un partido en el que parecían las víctimas.