Lions sorprende y le quita el invicto a los Seahawks tras una noche mágica de Jared Goff

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Jared Goff, mariscal de campo de los Detroit Lions | Reuters
Jared Goff, mariscal de campo de los Detroit Lions | Reuters

Los Detroit Lions vencieron a los Seattle Seahawks por 42-29 y le quitaron el invicto a los visitantes del Ford Field, un resultado medianamente inesperado, pero que surgió gracias al trabajo de la ofensiva comandada por el mariscal de campo Jared Goff, en la cita del Monday Night Football de la Semana 4 en la NFL. 

El quarterback del combinado local se apoyó en las piernas de David Montgomery y juntos le dieron la primera anotación al equipo gracias a un touchdown de una yarda, suficiente para controlar el primer cuarto donde se veían imparables para unos Seattle Seahawks que no entendían del todo cómo detener a sus rivales. 

Después de irse arriba por 14 puntos, vía Jahmyr Gibbs, a los visitantes parecía costarles trabajo meterse de lleno al encuentro, entonces un buen manejo del cronómetro con jugadas cortas de Geno Smith, pudo llevar al balón casi a línea de fondo y con una finta infantil que le permitió a Kenneth Walker III acceder a la zona roja.

Jahmyr Gibbs volvió a anotar por la vía terrestre, en una jugada similar a su primer touchdown: correr hacia el centro y esperar a que sus compañeros le abrieran el hueco. Los Detroit Lions tenían la sartén por el mango, así que la defensiva de los Seahawks tuvo que apretar las tuercas para atrapar en alguna ocasión a Jared Goff, pero esto no mermó el trabajo del mariscal de campo. 

Kenneth Walker III hacía un estupendo trabajo con Seattle, pero no era suficiente. Geno Smith encontró a AJ Barner en una jugada de nueve yardas. El receptor se aventó para alcanzar la anotación. En ese momento parecía que los Seahawks despertaban, pero por cada movimiento que provocaron en el marcador, venía uno de sus rivales en contra respuesta. 

Los Lions se burlaron lo suficiente, pues en una jugada inesperada, Amon-Ra St. Brown le regresó el balón a Jared Goff con un globito que destanteó a la defensiva de los visitantes.  Más tarde, Jameson Williams corrió desde su campo hasta el extremo del territorio enemigo en un touchdown de 70 yardas.

Los puntos caían una y otra vez; Kenneth Walker III acercó los cartones con su tercera anotación del día, pero sus puntos fueron estériles porque Detroit conseguía responder casi de inmediato. Sin embargo, lo que hundió a los entonces invictos fue un touchdown de Amon-Ra St. Brown, quien recibió un pase que se veía complicado, pero que resolvió al colocar sus dos pies en la zona legal y así terminar con el sueño de remontada de Seattle, el equipo que dejó un balón en el aire que fue capturado por Joseph para que los Lions cerraran la victoria.

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