Los Bears presentan el que sería su nuevo estadio techado para la Era Caleb Williams

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Los Bears siguen en la misión de tener un nuevo estadio y con la misión de seguir dentro de la ciudad de Chicago.

El miércoles, se realizó el evento para presentar oficialmente el proyecto de un nuevo estadio techado a un costado del Lago Michigan.

Chicago dejaría el Soldier Field para pasarse a este nuevo desarrollo, que incluye un estadio con techo traslúcido, similar al SoFi Stadium de Los Angeles o el Allegiant de Las Vegas, y también tiene una cabecera con una gran ventana que permitiría ver el skyline de la Ciudad de los Vientos, similar a lo que pasa en el estadio de los Cowboys (aunque esperemos sin la luz cegadora en las tardes).

El proyecto incluye imágenes de eventos adicionales dentro del estadio, incluyendo imágenes del Final Four del baloncesto NCAA, y con este recinto, Chicago podría recibir un Super Bowl por primera vez.

El estadio estaría a un costado del Soldier Field, el cual sería remodelado y ‘reducido’ a su tamaño original, pero que seguiría siendo usado para otros deportes, además de tener un memorial para honrar a la milicia.

Los Bears destinarían $2,000 millones de dólares para el proyecto, aunque la ciudad (y los contribuyentes) pagarían la mayoría (el Chicago Tribune reporta que el costo total sería de 4,600 millones), en parte reclasificando la deuda de estadios actuales de los Bears y White Sox.

El proyecto todavía debe ser puesto a votación por la legislatura local.

El equipo tenía idea de moverse a los suburbios, a Arlington, pero los impuestos de la propiedad serían más altos de lo esperado, por lo que dieron marcha atrás al plan.  El principal cambio que se espera para este estadio es que los Bears tengan un domo, el cual les permita jugar cuando el clima se los complique y eso coincidiría con la llegada del nuevo mariscal, Caleb Williams, quien será elegido con la primera selección del Draft del jueves, con espera de tener la mejor ofensiva en la historia de la franquicia, la única que nunca ha tenido una campaña de más de 4,000 yardas por pase.

No es novedad que Chicago sea una ciudad difícil para jugar, desde el frío, la niebla y el fuerte viento, lo que ha hecho que tener un estadio con techo sea de gran importancia. Uno de los momentos que ha dejado en evidencia este tipo de problemas fue el tazón de la niebla de 1988, cuando el clima complicó el duelo entre Bears y Philadelphia, al grado de que en la transmisión del juego no se podía ver nada.

Además de los complicados vientos que han hecho sufrir a más de un quarterback para poder triunfar en el estadio que está a punto de cerrar su historia en la NFL. Chicago se espera que tome a los

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