Shaquille Leonard finalmente luce y suena como en antaño. El linebacker estrella de los Colts de Indianápolis corre de un lado a otro, hace jugadas en el campamento de entrenamiento y le inyecta energía a sus compañeros con su acostumbrada voz interrumpida.
El sábado, después de perderse la mayor parte de la temporada pasada a causa de un nervio pellizcado que requirió cirugía que le puso fin a su campaña, el tres veces All-Pro dio otro gran paso en su recuperación al regresar a entrenar con contacto completo en los ejercicios del equipo. Uno de los jugadores más observados en el campamento, también sabe que le queda un obstáculo por superar.
“Simplemente salgo y me quito el miedo de tener contacto”, dijo Leonard. “Todavía diría miedo, el solo poder tener contacto por primera vez en mucho tiempo, sin saber qué sucederá, se siente bien, se siente increíble y estoy feliz de estar allá afuera”.
Era evidente cada vez que Leonard alineaba en Grand Park, en Westfield, Indiana, a 30 minutos de la sede del equipo. Y fue notorio en su evaluación sincera después del entrenamiento.
Desde que llegó a la liga en 2018, el egresado de la estatal de Carolina del Sur, nunca ha sido tímido en expresar sus opiniones.
Ha emergido como un importante defensor de los Colegios y Universidades Históricamente Negros (HBCU), un vocero prominente en la campaña de concientización sobre la salud mental de los Colts “Kicking The Stigma” y con frecuencia explica cómo usa los desaires percibidos como motivación.
Aunque esta vez, Leonard ha descrito sus propias batallas.
Después de haberse visto afectado severamente por lo que inicialmente los doctores diagnosticaron como una lesión de espalda en 2021, Leonard se perdió seis de los primeros siete juegos de la temporada pasada antes de someterse a una segunda cirugía para aliviar un dolor nervioso en la parte inferior de la pierna izquierda. Los 14 partidos que se perdió representan más del doble de los que se ausentó en las cuatro temporadas previas combinadas y la ausencia prolongada, ha dicho Leonard en repetidas ocasiones, lo han hecho sentir como si no fuera parte de los Colts.
Por supuesto que sus compañeros y entrenadores siempre han sentido diferente.
“Físicamente, realmente se ha retado a si mismo”, dijo el coordinador defensivo Gus Bradley. “Sabe el nivel y el estándar de lo que es su nivel de juego y como debe lucir y ve que se está acercando cada vez más a ello. Si no es como el piensa que debería verse, él es su peor crítico, por lo que estamos en un punto en el que le damos un poco de gracia a medida que supera esto y lo va a hacer, pero él quiere jugar a ese nivel ahora mismo”.