Abhinav Bindra, el hombre que ganó el oro en Beijing 2008 con un rifle ‘alterado’

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El escándalo de Abhinav Bindra en Beijing 2008 | AP
El escándalo de Abhinav Bindra en Beijing 2008 | AP

Abhinav Bindra se convirtió en el primer hombre de la India en ganar un oro, un hecho realizado durante los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, a pesar de que su rifle tenía problemas en la mira que orillaron al indio a dar el extra con tal de llevarse el oro a casa. 

El indio ganó la prueba de rifle de aire comprimido de 10 metros con una puntuación total de 700,5, una victoria anotada en los libros de historia de la India porque fue el primer hombre en ganar un oro olímpico en una prueba individual.

A pesar de que la India tiene una población de más de un billón de personas, los triunfos deportivos a nivel internacional son apenas contados. Con 15 años, Abhinav Bindra apuntaba a ser el hombre que cambiaría el curso de la historia deportiva de su país luego de su participación en los Juegos de la Commonwealth de 1998 y tras la experiencia que había ganado en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000. 

Atenas 2004 parecía como la mejor oportunidad para que el Indio hiciera historia, sobre todo al romper el récord olímpico con una puntuación de 597/600, pero en la final quedó por debajo de los 100 puntos, razón por la cual tuvo que esperar cuatro años más para hacer la gesta de su vida. 

“Solo cinco minutos antes de la gran final, me di cuenta de que la mira de mi pistola había sido alterada solo un poco. Mi cabeza entró en pánico, pero, menos mal, al venir a Beijing me había entrenado para ello”, declaró Abhinav Bindra frente a los medios de comunicación. 

Zhu Qinan, campeón en Atenas 2004 y el rival a vencer, tenía el control de las emociones en la fina, hasta que Abhinav Bindra logró un 10.8 para alcanzar el oro luego de disparar por encima del 10 en cada una de las rondas que componen la prueba final. Puntuaciones: 10.7, 10.3, 10.4, 10.5, 10.5, 10.5, 10.6, 10.0, 10.2 y 10.8.

“Aquellos diez tiros fueron mágicos. Estabilidad, el momento adecuado, la ejecución… fueron los mejores disparos de mi vida. Lo sabía: no podía disparar mejor”, insistió el ganador de aquel histórico oro. 

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