Santiago Lange, el medallista olímpico que superó el cáncer de pulmón

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Al velerista argentino siete veces olímpico, Santiago Lange, le diagnosticaron cáncer de pulmón en 2014, pero la enfermedad no lo imposibilitó participar en los Juegos Olímpicos de Rio 2016, donde ganó la medalla de oro en la modalidad de Nacra 17 en equipo con Cecilia Carranza. El 17 de noviembre se conmemora el Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Pulmón.

Lange nació el 22 de septiembre de 1961 e inició su carrera profesional durante la universidad, mientras estudiaba arquitectura naval en Inglaterra. Participó en los Juegos Olímpicos de Seoul 1988, Atlanta 1996, Sydney 2000, Atenas 2004 y Beijing 2008, conquistando dos medallas de bronce en la prueba de tornado en los últimos dos.

En entrevista con Olympic Channel, el regatista argentino contó que después de la justa en China, él ya no se interesaba en participar en unos Juegos, sino que apoyaba a sus hijos a llegar a unos.

“Yo estaba entrenando a mis hijos, completamente fuera del Olimpismo”, explicó Lange.

Pero no se sintió cómodo con el proceso, por lo que él decidió regresar a competir en una nueva prueba con una compañera nueva: Cecilia Carranza. En su primer intento, un Mundial de la especialidad, consiguió su pase a Rio 2016.

Ya con el boleto olímpico, al oriundo de San Isidro fue diagnosticado con cáncer de pulmón y, en 2015, por la misma enfermedad, a Lange le extirparon el 80% de su pulmón izquierdo, con miedo de recuperarse a tiempo para los Juegos Olímpicos.

“A tantos meses de la justa y si hacemos la operación hoy, lo lógico es que llegues a los Juegos, pero no con la misma capacidad pulmonar“, comentó el médico.

“Tenía tan poca fuerza que no podía vibrar el barco, entonces sólo navegábamos hacia un lado. Los nueve meses de la operación a Rio 2016 fueron el esfuerzo más grande de mi carrera deportiva“, recuerdó Lange.

Con la meta de participar en los Juegos Olímpicos, el regatista de 55 años y su compañera se mudaron a Río de Janeiro para continuar con su recuperación y su entrenamiento para la justa.

Una vez ahí, no fueron los mejores en ninguno de los días de competencia, pero tuvieron el mejor promedio. En la regata final, la pareja se recuperó de dos penalizaciones para ganar la medalla de oro.

“Es lindísimo ganar la medalla de oro, pero lo más importante es el camino”, afirmó Lange para Olympic Channel.