Los clavados antes del dominio chino en Juegos Olímpicos

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Desde los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, los representantes chinos conquistaron 44 de las 56 medallas de oro que se han otorgado en los clavados en justas olímpicas. El dominio del país asiático no siempre fue una constante en esta disciplina que entró al programa en Saint Louis 1904.

Los primeros años en los Juegos Olímpicos

En la irrupción de los clavados en el programa olímpico, los Estados Unidos ganaron cinco de las seis medallas que se repartieron en Saint Louis 1904 y no fue hasta Estocolmo 1912 que se incluyó a las mujeres en las pruebas acuáticas de los Juegos Olímpicos.

Desde el principio, la rama femenil mostró más atletas con mejores técnicas, sobre todo en las pruebas de trampolín. Los Estados Unidos fueron la primera potencia de la disciplina en los Juegos Olímpicos. En Antwerp 1920, Aileen Riggin ganó el oro con 14 años de edad, y en Helsinki 1952, Patricia McCormick conquistó las dos pruebas de la justa y defendió sus coronas en la justa de Melbourne cuatro años después.

Por su parte, en la rama varonil durante la justa en tierras australianas, el mexicano Joaquín Capilla ganó la primera medalla de oro para la delegación azteca en clavados en unos Juegos Olímpicos, al conquistar la prueba de plataforma 10m varonil. Fue la única ocasión en diez ediciones (Antwerp 1920 a Tokyo 1964) que un estadounidense no ganó la presea dorada.

Greg Louganis pospone el dominio chino varonil

China ganó su primera medalla de oro en los clavados en Los Angeles 1984 y en Seoul 1988, la delegación asiática buscaba afianzar su dominio en la disciplina tras ganar el primer lugar en las dos pruebas femenil. Al mismo tiempo, el estadounidense Greg Louganis buscaba ser el primer hombre en conseguir las dos preseas doradas de clavados en dos ediciones consecutivas.

A lo largo de la justa, el saltarin de 28 años enfrentó varios retos, como una fiebre y una lesión de muñeca en la ronda preliminar del trampolín de 3 metros. Cuando llegó a la final, se enfrentó al chino Tian Liangde, quien lo venció en dos ocasiones previas a los Juegos, y a un accidente: en el noveno salto de la ronda preliminar, golpeó su cabeza contra el trampolín en el giro. Louganis no perdió el conocimiento y pudo salir de la alberca por su propia fuerza.

El impacto le ocasionó al clavadista una herida de casi 10 cm que requirió suturación. Sorprendentemente, el estadounidense finalizó la ronda preliminar y, posteriormente, ganó la medalla de oro en el trampolín de 3 m y la plataforma de 10 m, con lo que se convirtió en el primer hombre es conseguir las dos preseas doradas en clavados en dos justas consecutivas.

Desde entonces, únicamente el estadounidense Mark Lenzi en Barcelona 1992 y el ruso Ilya Zakharov en Londres 2012 le quitaron la medalla de oro a China en el trampolin 3m varonil, mientras que en la plataforma de 10m, no ganaron el primer lugar en tres ocasiones.

Por su parte en la rama femenil, no ha habido clavadista que le pueda quitar la presea dorada a las chinas en el trampolín de 3 metros desde 1992 y, solamente la estadounidense Laura Wilkinson en Sydney 2000 y la australiana Chantelle Newbery en Atenas 2004 conquistaron el metal de honor en la plataforma de 10 metros en los Juegos Olímpicos.

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