Tres semanas después de haber sido eliminado por el Atlético de San Luis en el repechaje de la Liga MX, el Club León enfrentó la final de la Liga de Campeones de la Concacaf, en la que recibiría en la ida al LAFC de la MLS; con mucho tiempo sin competencia de alto rendimiento, 24 días pueden ser una eternidad cuando se necesita mantener el ritmo y el entendimiento dentro de la cancha, por lo que parecía que en León se había cometido un error al dejar ir la oportunidad de pelear por el título de la liga local, cuando se podía entender que había capacidad para ir por las dos finales. El Atlético San Luis le encajó tres goles en casa y lo demás es historia; con un equipo Tigres que también buscaba el doblete, pero se tuvo que conformar con dar la vuelta solo en el campeonato mexicano y con un conjunto ’esmeralda’ que después de un parón importante, saldría victorioso, pero sin gran ventaja del primer partido de la final de la justa continental.
Ha sido de llamar la atención, cómo los jugadores ‘esmeraldas’ se acoplaron casi de manera inmediata a la idea de juego que propuso el nuevo cuerpo técnico, encabezado por Nicolás Larcamón; cuando la norma en el fútbol mexicano es poner muchos pretextos de adaptación para el primer torneo en el que un nuevo entrenador se hace cargo de algún equipo.
Después de su paso por Puebla, en donde demostró su capacidad de dirección y manejo de grupo, donde también elevó las metas de uno de los equipos que parece competir contra gigantes en una liga dispareja en cuanto a presupuestos, Larcamón llegó a León como si les hubieran hecho a la medida; tanto club, como técnico encontraron una sinergia en la que se potencializaron las virtudes y se regresó al equipo la personalidad con la que regresó a Primera División y sus tres campeonatos desde entonces.
La Liga de Campeones de Concacaf es un torneo que, por episodios ha complicado a algunos clubes mexicanos; la última edición fue la final en la que Pumas no logró su cometido y por primera vez un equipo de la MLS asistiría a la cita del Mundial de Clubes. Pero también en las fases previas ya existe un déficit de resultados de equipos mexicano frente a rivales de la zona; esta vez fueron Atlas y Pachuca los que no lograron colocarse en semifinales, para perder ese espacio frente a dos equipo de la liga estadounidense, Philadelphia y LAFC, a la postre sería el equipo angelino, en donde participa y mueve la batuta Carlos Vela, el conjunto que representará a la MLS en la final del certamen, recibiendo la vuelta de la serie en casa por haber terminado un punto por encima de León, que sufrió una derrota como visita frente al modesto equipo haitiano Violette, partido que se jugó en República Dominicana. León también perdió la oportunidad de cerrar la final en casa por lo que irá a Los Ángeles a tratar de culminar la serie en un ambiente en contra.
Era de suma importancia para el cuadro del Bajío salir con una importante ventaja de casa, para llegar a territorio estadounidense con cierta calma; el partido estaba planeado para anotar, por lo menos, dos goles y evitar que el visitante anotara; la primera parte del plan trazado salió a la perfección.
León se adelantó en el primer tiempo dos goles a cero, por lo que en la segunda mitad tendría que aguantar el resultado, manteniendo controlados los embates de LAFC. Un gol más les daría la tranquilad necesaria, y éste llegó pasado el minuto 90 de juego, pero, según el cuerpo arbitral, acompañada de una falta por parte del anotador, por lo que el marcador no subió.
Dos minutos después, aún en tiempo de compensación llegaría el descuento del conjunto angelino, también precedido de una falta en el inicio de la jugada, pero esta vez los árbitros designados no otorgaron la anulación y el tanto del equipo visitante sí contó.
Se hace evidente que el arbitraje en Concacaf no es parejo en calidad, fuera de los silbantes que trabajan en la Liga MX o la MLS, no hay una paridad en el resto de la zona, al ser, generalmente, conjuntos mexicanos y estadounidenses los que llegan a la final y no es posible, por conflicto de intereses, designar a un árbitro de estos países, habría que preguntarse si no es conveniente que para la instancia final del torneo, el arbitraje se pueda apoyar en alguna otra confederación de fútbol para que los silbantes no desentonen con el juego y la importancia del partido.
De momento, la serie no se encuentra definida, el gol de último momento de LAFC le da cierto respiro al equipo para recibir a León con una ventaja remontable. El próximo domingo se verá de qué está hecho el equipo de Larcamón.
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