El próximo fin de semana arranca el primero de tres triples headers que tiene programados la máxima categoría en este 2023. Hace no mucho tiempo, la primera carrera de la temporada europea se realizaba en el circuito de Montmeló en Barcelona, España, y era en este que los equipos presentaban las actualizaciones que nos podían dar una idea de lo que se esperaba el resto de la campaña, así como cuál era el equipo o piloto más prometedor.
Este año esa primera carrera se corre en el Autódromo Enzo e Dino Ferrari de Imola, que alberga el Gran Premio de Emilia-Romaña. Pocas dudas quedan respecto a que el campeonato podría ser dominado por Red Bull. La superioridad de su RB19 es evidente y nos hace recordar lo que hace no mucho hacía con Mercedes.
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También es evidente que Checo Pérez le ha encontrado el modo a su auto y se ha convertido en el más fuerte competidor de su coequipero, Max Verstappen. ¿Podrá Checo pelearle el título al doble campeón del mundo?
La fluctuación entre los tiempos de ambos parece haber quedado atrás y Checo tiene que aprovechar la inercia que su gran forma en esta temporada le ha generado buenos dividendos.
Las tres carreras consecutivas podrían ser un punto de inflexión: Imola sería el inicio; en Mónaco sabe cómo hacerlo; y en España casi corre como local. Las tres, una muestra de qué tanto podría Checo poner en apuros a su poderoso vecino en los pits.