Donovan Carrillo sorprendió al mundo en los Juegos Olímpicos de Beijing 2022, al convertirse en el primer patinador mexicano que aparecía en una justa invernal en los últimos 30 años. Su sola presencia ya era histórica para el país, al marcar un antes y un después para México. Sin embargo, eso no fue todo, pues su actuación sobre el hielo hizo aún más memorable su participación, al convertirse en el primer mexicano y latino de la historia en clasificar al programa libre en unos Juegos Olímpicos de Invierno.
Rápidamente, su nombre acaparó la atención del país, al postrarse los reflectores sobre de él, con la ilusión de ver y admirar su trabajo, poniéndole un plus perfecto a su participación al protagonizar la mejor actuación de su carrera con un 79.69 en el programa corto y un 138.44 en el libre, números con los que superó sus mejores puntuaciones con un total de 218.13, con los que se ubicó en el lugar 21 de la clasificación general… ¡Historia Pura!
Desde entonces, el representante de patinaje artístico mexicano ha incrementado las expectativas hacia esta disciplina y hacia sus mismas aspiraciones, con la ilusión de seguir brillando por México en el hielo.
Y es que, tras haber sido designado como Premio Estatal del Deporte 2022, el representante de Guanajuato ingresó al quirófano para someterse a una operación en el tobillo para dejar atrás unos problemas que lo molestaban, por lo que ahora se enfila a seguir mejorando sus actuaciones y seguir haciendo historia.
Sus logros han ido de menos a más, motivo por el que también se convirtió en el primer mexicano en ser nominado a los premios de la ISU Unión internacional de patinaje, además de también ser el primer patinador mexicano en lograr un salto cuádruple Salchow en una competencia nacional, situación que se dio en el 5to Festival Abierto Mexicano 2021.
Hoy, Donovan Carrillo sigue creciendo como deportista y aunque se quedó con la espinita clavada de no poder participar en el Mundial, tras perder sus patines, tiene la mente puesta en superar todas sus marcas para escribir su nombre en lo más alto del deporte.