Reseña: The Marvels, una película que desafía las probabilidades

The Marvels tenía todo en su contra: mala publicidad, malos comentarios de la audiencia, problemas detrás de cámaras, enojo de los fans, fatiga de franquicia y bajas expectativas en realidad, que hizo que muchos la perfilaran como el siguiente gran fracaso de Marvel, tanto en taquilla como con la audiencia. Sin embargo, esta cinta nada contracorriente y logra sobreponerse a las adversidades como una experiencia que, si bien no está a la altura de pesos pesados del MCU, sí termina por ser una adición sólida a la franquicia. En pocas palabras, The Marvels merece la oportunidad de la audiencia, quienes verán una cinta que cumple con lo más importante: entretener y, en este punto del MCU, volver a generar expectativas reales sobre el futuro del multiverso cinematográfico.

La película tiene algo que parecía improbable, pero que se da con naturalidad como ya quisieran muchos sitcoms: química entre sus personajes. Emparejar a esta triada curiosa de dos Capitanas Marvel y una joven superheroína con poca experiencia, pero mucho corazón resulta mejor de lo que uno podría imaginar. El encanto de Iman Vellani es innegable, pero también hay que resaltar la naturalidad con la que Brie Larson parece soltarse en su papel. Esto crea una dinámica interesante y, aunque breves, los momentos de unión entre los tres personajes principales pegan con fuerza.

Algo a notar es que Captain Marvel adolece de las mismas fallas que otras entradas en el MCU: una historia formuláica en la que se ven los hilos de los tres actos aristotélicos, así como un villano predecible y poco memorable. Claro que, en este caso, Dar-Benn busca ser un antagonista con el que empaticemos, ya que, aunque sus métodos no son las adecuados, su causa es justa. En este sentido, busca evocar a Killmonger, pero termina siendo una imitación pálida de uno de los posibles mejores villanos de todo el MCU. La cinta también busca poner a Carol Danvers en una posición moralmente ambigua, pero sin el peso que esto supondría, al no querer comprometer demasiado al personaje y alejarlo de su ideal como paragón de la justicia.

The Marvels es la película con menos duración de todo el MCU y, aunque se agradece el gesto, es posiblemente la que menos debió haber sufrido el recorte, ya que se habría beneficiado de al menos 15 minutos más, para que el final no se sintiera tan apresurado. El estilo visual del inicio de la película también es una adición sumamente bien recibida, pues toma directamente de la serie de Disney+, Ms Marvel, con el único problema de que, después de los primeros 5 minutos, no volvemos a ver la animación 2D ni los efectos especiales híbridos que hicieron tan llamativa la serie. Podemos culpar de esta omisión a la crisis que, ahora, sabemos existe al interior de Marvel Studios con respecto a las demandas imposibles a los equipos de VFX.

The Marvels cumple y, a decir verdad, para una película de la que se tenían pocas expectativas, termina entregando más de lo esperado. Es una película que deja a Ant-Man and the Wasp: Quantomania muy rebasada y que se nos hace sentir más bien en los tiempos de la fase 2 del MCU.