The Acolyte, la otra cara de los Jedi. Reseña sin spoilers
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The Acolyte es la más reciente adición al mythos de Star Wars. Esta serie de Disney+, marca una primera vez para Star Wars en varios aspectos. Es la primera vez que una mujer crea una serie para la franquicia, pero también es la primera vez que visitamos en live-action la Alta República, una era de apogeo para los Jedi y para la República misma. En este sentido, The Acolyte presenta aspectos nunca antes vistos de Star Wars en pantalla que nos ayuda a entender a la Orden Jedi bajo otra perspectiva.
¿En qué época está desarrollada The Acolyte?
La serie se sitúa 132 años antes de la Batalla de Yavin, o sea, el Episodio IV. A este periodo se le conoce como la Alta República, el apogeo de la orden Jedi y la República Galáctica, que duró de entre 500 y 100 años antes de la Batalla de Yavin.
La Alta República se da gracias a la victoria de los Jedi en la guerra contra los Sith, punto en el que se creyó que estaban extintos. Esta época de paz y prosperidad permitió el florecimiento de la cultura, así como de la Orden Jedi. De hecho, los Jedi que conocemos durante la Alta República son muy diferentes a los de la era de las precuelas. En la Alta República, la Orden era mucho menos aprehensiva y dogmática. Su entendimiento de la Fuerza era más flexible, lo que daba pie a habilidades de la Fuerza muy poco comunes en la época previa a la caída de la República y el Imperio Galáctico.
¿De qué trata The Acolyte?
La serie nos presenta una historia de venganza llana y simple, una misión que debe completarse para eliminar a cuatro maestros Jedi. La perpetradora es la acólita titular, una aprendiz del Lado Oscuro de la Fuerza de cuyo maestro no sabemos nada, y es ahí donde radica el verdadero misterio en The Acolyte. Recordemos que, para este punto, se cree que el mal ha sido exterminado de la Galaxia, por lo que la presencia de un acólito Sith puede poner en entredicho la victoria de la Orden y traer consigo una era de oscuridad.
Los primeros dos capítulos de ls serie nos presentan un thriller bien ejecutado con tensión suficiente como para mantenernos atentos todo el tiempo y suficientes preguntas como para tenernos siempre sospechando de todo. El modelo de caja misteriosa es competente, si acaso un poco predecible, pero lo verdaderamente interesante es conocer las motivaciones de la protagonista y la antagonista, quienes están en un claro curso de colisión que llevará a una inevitable revelación catastrófica para todos.
El misterio de por qué esta figura sombría quiere eliminar específicamente a cuatro maestros Jedi también nos ayudan a ver a los miembros de esta Orden de forma distinta, quizás un tanto más humana -o humanoide, según sea el caso-. Y cada que conocemos a un Jedi más, queremos conocer más de su historia, algo que nos hace encariñarnos rápidamente con los personajes.
Estos primeros dos episodios nos llevan en una aventura entre planetas, como toda buena historia de Star Wars debe, y nos presenta una galaxia amplia, repleta de criaturas de todo tipo, que se siente viva, y eso es sumamente importante. Mientras más nos remontamos en el tiempo antes del ascenso del Imperio Galáctico, la República debe parecer vibrante, colorida y diversa; ésa era la intención original de las precuelas, mostrar el contraste entre la versión sanitizada y estéril después del Imperio y los colores vivos de la vida en la República.
The Acolyte, si se le diera un tratamiento distinto, podría funcionar como un procedural de detectives tratando de investigar los asesinatos de los Jedi, quizás algo al estilo 24, con una amenaza latente y los esfuerzos de un grupo de élite por intentar detenerla. Todos los elementos están presentes. En cambio, debido al peso que se le da al drama de los personajes, termina por ser más un thriller que, con todo y algunos fallos, termina por enganchar a la audiencia y nos hace querer conocer más de esta época y de estos personajes.
En donde la serie sí comete un fallo enorme es en el manejo de sus secuencias de acción y combate. Para ser una época tan florida como la Alta República, esperaríamos ver técnicas de combate elegantes, eficientes y deslumbrantes, todo lo contrario al combate falto de técnica adecuado para quienes crecieron en una época en la que los Jedi estaban extintos. Luke Skywalker y Rey no tuvieron un entrenamiento formal con maestros ordenados dentro de las estructuras del templo. No fueron guiados desde Younglings ni enseñados a usar el sable de luz con eficacia. Lo mismo con Cal Kestis, quien sólo tuvo una formación como padawan, que se vio interrumpida por la Orden 66, y aún así adquirió formidables habilidades de combate.
En cambio, durante series como Clone Wars, vemos a prodigios de la técnica, como la propia Ahsoka Tano, quien se especializó al límite de sus habilidades, o el propio Mace Windu, tan voraz en su manejo con el sable de luz que inventó su propia técnica, el Vaapad.
The Acolyte debe, al menos en sus capítulos subsecuentes, mostrar lo que una formación dentro de las estructuras del templo puede lograr. Las técnicas de sable de luz deben ser de lo más espectacular si se busca respetar la noción de que fue la era dorada de la Orden. Y, hasta el momento, no hemos podido ver nada de eso.
¿Cuándo se estrena The Acolyte?
La serie se estrena hoy por Disney+ a las 7:00 Pm (hora de la Ciudad de México).