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El caso de presunta violación que involucra al exfutbolista brasileño Dani Alves ha dado un nuevo giro. La víctima, a través de su abogada Ester García, ha emitido un comunicado revelador. La joven, que denunció a Alves por agresión sexual tras lo sucedido en una discoteca de Barcelona en diciembre de 2022, ha aclarado que, a pesar de las “conversaciones” mantenidas con la defensa del exjugador, no ha alcanzado ningún acuerdo.
Según el comunicado, las discrepancias entre las partes sobre la gravedad de los hechos y las penas a imponer han impedido cualquier entendimiento. Aunque Alves ya enfrenta cargos por agresión sexual y la Fiscalía busca nueve años de cárcel y una indemnización de 150 mil euros para la víctima, la acusación particular aún no ha presentado su escrito de calificación.
La abogada de la víctima resalta que la joven no ha renunciado a la posible indemnización que le correspondería. Aunque en agosto pasado expresó inicialmente esa renuncia, se revocó después de concluida la investigación, marcando un cambio significativo en su posición. La abogada justifica este cambio señalando que la víctima no era plenamente consciente de las implicaciones del proceso penal en ese momento.
No hay acuerdo
En cuanto a las conversaciones entre las partes para alcanzar un acuerdo, el comunicado indica que la defensa de Alves propuso reducir la pena a cambio de reconocer los hechos e indemnizar a la denunciante, pero hasta ahora no se ha llegado a ningún pacto. A pesar de que Alves ya pagó los 150 mil euros exigidos por la jueza instructora como posible indemnización, la defensa busca una rebaja en la condena.
La acusación particular critica las “informaciones sesgadas” difundidas en el último mes sobre estas conversaciones y advierte que tomará acciones legales contra aquellos que difundan afirmaciones falsas que aumenten el sufrimiento de la víctima.
El caso, que ha mantenido a Dani Alves en prisión provisional desde enero, parece dirigirse hacia un juicio a principios del próximo año. Mientras tanto, la víctima busca justicia, destacando en su comunicado que los daños morales y las secuelas son “irreparables” en casos de agresión sexual.