Novak Djokovic se estrenó el lunes en Roland Garros con una solvente victoria 6-3, 6-2, 7-6 (1) sobre el debutante Aleksandar Kovacevic.
A la caza de un 23er título de Grand Slam para dejar atrás a Rafael Nadal en la cima de la lista histórica del tenis varonil, el astro serbio arrasó en los primeros dos sets ante un adversario sin antecedentes en el cuadro principal de una de las grandes citas.
Kovacevic logró quebrar el servicio del dos veces campeón en la arcilla de Roland Garros para forzar un desempate en el tercer set.
“Perdí algo la concentración en el tercer set y en este nivel no se puede regalar nada, pero en líneas generales las sensaciones son positivas“, dijo Djokovic. “Tengo mucha motivación por llegar lejos en el torneo. Este sólo es el inicio”.
Djokovic obtuvo su 86va victoria en Roland Garros y figura segundo por detrás de las 112 de Nadal.
El próximo rival de turno del tercer cabeza de serie será el húngaro Marton Fucsovics.
Schwartzman triunfa en la arcilla
Al borde de salir de los 100 primeros del ranking e inmerso en una racha de cinco derrotas, el argentino Diego Schwartzman coronó una gran remontada en una batalla de cinco sets para vencer al español Bernabé Zapata (32do cabeza de serie) por 1-6, 6-7 (5), 6-2, 6-0, 6-4.
Schwartzman llegó a ser el número ocho del mundo en 2020, año en el que alcanzó las semifinales de un Roland Garros que se disputó en otoño. Pero se ha derrumbado en los rankings durante los últimos meses.
“No quiero jugar por inercia”, dijo Schwartzman, quien en la próxima ronda se medirá con el portugués Nuno Borges. “Llevo muchos años acabando entre los 20 mejores y no es fácil asumir ahora esta situación”.
“Ya no soy un nene, tengo 31 años y si esto se prolonga otra temporada, veo difícil poder aguantar mentalmente”, aseveró con firmeza un Diego Schwartzman que buscará dar continuidad a su triunfo en Roland Garros 2023 frente al portugués Nuno Borges.