La selección de los Estados Unidos no recibía cinco goles en casa desde la victoria de México en Copa Oro 2009

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La goleada de Colombia a los Estados Unidos | Reuters; Burke-USA TODAY Sports
La goleada de Colombia a los Estados Unidos | Reuters; Burke-USA TODAY Sports

Colombia demostró por qué llevaba 21 partidos como invicta tras clavarle a la selección de los Estados Unidos un 5-1, la ‘manita’ que no veía el conjunto de las barras y las estrellas desde 2009 cuando México los humilló en Copa Oro, un recordatorio que al equipo de la Concacaf todavía le falta trabajar en el terreno de juego pese a que presume una generación dorada de futbolistas. 

Cabe resaltar que el cuadro cafetero ya había vencido al USMNT por 2-4 en un partido amistoso de 2018, pero nada comparado con lo visto en el FedEx Field en Landover, Maryland este fin de semana porque el equipo que comanda Gregg Berhalter parece que volvió a una realidad de la que supuestamente habían escapado con su generación dorada. 

Colombia se quedó con un saldo a favor de 13 victorias, cinco empates y apenas tres derrotas en enfrentamientos ante los Estados Unidos, los anfitriones de la próxima Copa América en la que participarán los dos países que hoy se vieron las caras con una distancia futbolística considerable. 

El USMNT no recibía una humillación de la misma categoría desde que México los exhibió en 2009, aunque con el asterisco de que el primer equipo de Estados Unidos jugaba ese mismo verano la última Copa Confederaciones con Bob Bradley como técnico y quien tuvo que dividir al equipo en dos. 

México se quedó con esa Copa Oro de la mano de Giovani Dos Santos y Carlos Vela, Israel Castro y Guillermo Franco en una de las últimas noches que el conjunto tricolor pudo humillar a los Estados Unidos, puesto que la falta de victorias ante eterno rival se convirtió en una tónica prácticamente desde la última década. 

Gregg Berhalter tendrá que dar una sacudida a los Estados Unidos porque el tiempo apremia y Colombia sólo es un ejemplo de la falta de calidad para una plantilla que soñaba con levantar la Copa América este verano con el supuesto mejor XI de toda su historia. 

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